Según Mikah de Waart, hay cinco hábitos imprescindibles al levantarnos a fin de disfrutar de un día lleno de energía:
1. Escoge cómo vas a sentirte, pase lo que pase. El poder de la intención hará que te centres en tus capacidades más que en las circunstancias. Corre por ahí una bella frase: “El pajarillo confía en sus alas, no en la rama que lo sostiene”.
2. Respira. La oxigenación adecuada del organismo es más importante de lo que piensas, dado que, por regla general, respiramos utilizando una mínima parte de nuestra capacidad pulmonar. La propuesta es hacer de cinco a diez respiraciones profundas acompañadas de estiramientos en la cama, nada más despertar.
3. Hidrátate. Un sencillo vaso de agua en ayunas pone en marcha el sistema digestivo y estimula el metabolismo para la eliminación de toxinas.
4. Desayuna sano. Al escoger los alimentos que vas a ingerir pregúntate cuáles harán que te sientas en plenitud de facultades (frutas o copos de avena) y cuáles, por el contrario, pueden entorpecer tu mente (bollería y azúcares).
5. Sentir gratitud por las personas y circunstancias que disfrutas. Esta gratitud ya te servirá para centrar tu mente en aspectos positivos y te ayudarán a tener una perspectiva optimista durante las horas que se abren ante ti.
No te dejes engañar por la aparente sencillez de estos consejos. En realidad, un coach te formularía preguntas destinadas a que reflexiones sobre qué hábitos te ayudan a mejorar tu despertar y cuáles te restan ganas de saltar de la cama para ponerte a funcionar. ¿Te sirven estos? ¿Cuáles añadirías?
Según Mikah de Waart, hay cinco hábitos imprescindibles al levantarnos a fin de disfrutar de un día lleno de energía: 1. Escoge cómo vas a sentirte, pase lo que pase. El poder de la intención hará que te centres en tus capacidades más que en las circunstancias. Corre por ahí una bella frase: “El pajarillo confía en sus alas, no en la rama que lo sostiene”. 2. Respira. La oxigenación adecuada del organismo es más importante de lo que piensas, dado que, por regla general, respiramos utilizando una mínima parte de nuestra capacidad pulmonar. La propuesta es hacer de cinco a diez respiraciones profundas acompañadas de estiramientos en la cama, nada más despertar. 3. Hidrátate. Un sencillo vaso de agua en ayunas pone en marcha el sistema digestivo y estimula el metabolismo para la eliminación de toxinas. 4. Desayuna sano. Al escoger los alimentos que vas a ingerir pregúntate cuáles harán que te sientas en plenitud de facultades (frutas o copos de avena) y cuáles, por el contrario, pueden entorpecer tu mente (bollería y azúcares). 5. Sentir gratitud por las personas y circunstancias que disfrutas. Esta gratitud ya te servirá para centrar tu mente en aspectos positivos y te ayudarán a tener una perspectiva optimista durante las horas que se abren ante ti. No te dejes engañar por la aparente sencillez de estos consejos. En realidad, un coach te formularía preguntas destinadas a que reflexiones sobre qué hábitos te ayudan a mejorar tu despertar y cuáles te restan ganas de saltar de la cama para ponerte a funcionar. ¿Te sirven estos? ¿Cuáles añadirías?